Artículos / Noticias 2018

 

Presentación del libro: ¿Reforma o ruptura? Una aproximación crítica a las políticas del Partido Comunista de España entre 1973 y 1977
FAN de Asturias, octubre 2018

Los pasados días 18 y 19 de octubre en La Felguera y Gijón, respectivamente, tuvo lugar la presentación del libro de Enrique González de Andrés titulado ¿Reforma o ruptura? Una aproximación crítica a las políticas del Partido Comunista de España entre 1973 y 1977. Ambas presentaciones estuvieron introducidas por Norberto Martín Gómez, miembro de la Fundación Andreu Nin, organizadora de dichos actos.
La idea fundamental que se plantea en el libro es dar voz a cientos de miles de personas anónimas que, en aquellos difíciles años del cambio de la dictadura franquista hacia un régimen democrático, lucharon por conseguir una sociedad justa. Algunos de ellos dieron su vida, miles terminaron en prisión y cientos de miles fueron despedidos y sancionados.
Para ello, el análisis sobre las políticas llevadas a cabo por el PCE es absolutamente fundamental, puesto que, entre otras razones, fue la organización política más importante en aquel periodo hasta el punto de catalogarse como el partido del antifranquismo. Tuvieron gran influencia sobre una parte notable de los enlaces y jurados de empresa, únicos "representantes" de los trabajadores en aquella época, lideraron las Comisiones Obreras, así como gran parte de las asociaciones de vecinos, de la juventud, profesionales, etc.
No solo fue un testigo privilegiado de multitud de acontecimientos que jalonaron aquellos años sino que además, en no pocas ocasiones, tuvo un peso decisivo en el desarrollo, en la evolución y la culminación de los mismos. Así, estudiar la estrategia, las tácticas y el programa del PCE puede ayudar a comprender el porqué de sus actuaciones y planteamientos en las empresas, en las fábricas, en los centros de estudio, en los barrios, etc.
En las presentaciones, se explicó que la estrategia revolucionaria del PCE pasaba por dos etapas. La primera consistía en derribar el régimen franquista y avanzar hacia una democracia política y social, dentro del sistema capitalista. La segunda, tras consolidarse la anterior, debía alcanzar el socialismo en libertad. Para ello, propiciaron una confluencia lo más amplia posible de sectores y clases sociales que incluía, obviamente, la clase trabajadora y sectores de la burguesía catalogados por el PCE como "democráticos". Esta alianza interclasista suponía silenciar, o eliminar, reivindicaciones obreristas y anticapitalistas, a la vez que, se evitaba que las movilizaciones, que el PCE fomentaba, se radicalizaran, al objeto de no atemorizar a dichos sectores.
Estos presupuestos teóricos se trasladaban en los discursos y en las actividades promovidas por el PCE. Así, se expusieron algunos ejemplos en el terreno social. En movilizaciones tan destacadas como la huelga general del 11 de diciembre de 1974 en Euskadi y Navarra, el PCE no la apoya porque, en su plataforma reivindicativa, figuraban reivindicaciones anticapitalistas. Asimismo, luchas tan emblemáticas como las que se dieron en Madrid en enero de 1976, lideradas por sindicalistas de las CCOO madrileñas pertenecientes al PCE, dejaron constancia de que alargar los conflictos podría derivar en una espiral de radicalización que perjudicaría a la propia clase trabajadora, lo que significó que, en muchas empresas y sectores, no se lograron las reivindicaciones, generando cierto malestar entre los trabajadores.
En cuanto al ámbito político, sobresale el referéndum para la reforma política, propuesto por el gabinete de Adolfo Suárez en los últimos meses de 1976. Su apabullante aprobación fue un espaldarazo a sus políticas, otorgándole la iniciativa a partir de esos momentos. No obedeció a la inteligencia y a las grandes dotes estratégicas del fallecido político sino que, fundamentalmente, motivado por los planteamientos de la oposición encabezada por el PCE. Los propios líderes de las principales organizaciones obreras de aquel período -PSOE, PCE y Partido Socialista Popular- reconocieron, años después, que no hicieron una campaña decididamente activa por la abstención acordada, a lo que debemos sumar que las fuerzas “moderadas” de la oposición propugnaron el sí, dar libertad de voto y la abstención pero explicitando las bondades del proyecto. El lograr tener una sola voz opositora se saldó con un estrepitoso fracaso.
Destacaron, a su vez, los Pactos de la Moncloa, a finales del año 1977, por cuanto el PCE tuvo una participación sobresaliente en su elaboración, aprobación y defensa. Las contradicciones más flagrantes se resumían en que el diagnóstico y el programa para solucionar los graves problemas que aquejaban a la economía española eran bastante coincidentes entre el gobierno de Suárez y los líderes del PCE, a la vez que estos últimos los defendían porque las medidas contenidas significaban un acercamiento a la democracia política y social propugnada por el PCE, antesala de una sociedad socialista. Sin embargo, el balance fue claramente negativo para las condiciones de vida y de trabajo del conjunto de la clase trabajadora española y bastante satisfactorio para los grandes empresarios.
En los debates, aparecieron críticas sobre el voluntarismo del PCE a lo largo de todo el franquismo y sus perniciosos efectos en la militancia y en determinados sectores de trabajadores, especialmente con las convocatorias de huelgas generales a finales de los años 50. En un escenario extraordinariamente hostil para el movimiento obrero, no tuvieron apenas eco y se consiguió el encarcelamiento de cientos de activistas y el desmantelamiento de las estructuras clandestinas. Eran momentos muy difíciles, sin duda, en que había que mantener las escasas fuerzas unidas pero no parecía el mejor método distorsionar la realidad en una visión cortoplacista.
Asimismo, se incidió en el papel heroico de la militancia del PCE, dedicada en cuerpo y alma a luchar contra el franquismo, por lo que, no se entendía el énfasis en criticar a dicha organización. Se respondió que el reconocimiento más honesto solo podría venir de una aproximación crítica a sus políticas, al objeto de que dicha experiencia sirviera para las futuras generaciones, profundizando los aciertos y evitando los errores.
Finalmente, el autor subrayó que el móvil de su investigación no era el contraste de pareceres frente a las tesis mayoritarias existentes en el seno del mundo académico sino, más bien, arrojar un poco de luz en un proceso histórico que, tras un análisis crítico de las experiencias acaecidas, sirva a las nuevas generaciones de luchadores.

No es libertad de expresión, es agresión
Agosto, 2018

Las fachadas de Podemos, Izquierda Unida, PSOE y UGT han amanecido embadurnadas, en diferentes días y localidades, con panfletos fascistas bajo el lema: “El Valle no se cierra”. La jueza de Primera Instancia 2 de Gijón ha dictaminado que eso es “libertad de expresión”.
El Valle de los Caidos es una edificación faraónica, construida con el dinero público y sobre las espaldas de prisioneros políticos, es decir, trabajadores forzados, a mayor gloria del sanguinario dictador Francisco Franco, que dejó ordenado que le enterraran junto algunos fieles y muchos de los que él consideraba sus enemigos, o sea, ciudadanos que pagaron con sus vidas la defensa del gobierno legal de la República.
Tras la presentación de las correspondientes denuncias, la jueza del Juzgado de Primera Instancia nº 2 de Gijón, ha dictaminado, sorprendentemente, que esa agresión no es tal, sino que está incursa en la "libertad de expresión".
Señora Jueza: Defender que no se desmantele el Valle de los Caídos es hacer apología de terrorismo fascista, empapelar y pintar reiteradamente las sedes de los partidos políticos legales es una agresión; permitirlo, con la disculpa de la libertad de expresión, es dar alas al fascismo, que, por desgracia, está creciendo en muchos países.   
Muchos de ellos han sido capaces de juzgar a sus asesinos, ejemplos de Alemania, Chile o Argentina. Aquí no llegamos a eso. Existe una ley (tibia, ciertamente) de Memoria Histórica, contra la cual se levantan voces no solo desde la derecha y desde el franquismo sociológico y mediático, sino también desde estamentos e instituciones del propio Estado, como el militar. (Recuérdese, a modo de ejemplo, el reciente escrito de militares, que han olvidado que la ciudadanía les paga sus salarios para defender las normativas constitucionales). Sería muy deseable, por tanto, que al menos lo poco legislado para borrar el pasado oprobioso se cumpliera.
Compañeros de IU, Podemos, PSOE y UGT: Desde la Fundación os enviamos toda nuestra solidaridad y nuestro apoyo para cuantos actos de repulsa consideréis oportuno convocar.

FUNDACIÓN ANDREU NIN de Asturias

Reunión del Patronato de la Fundación Andreu Nin en Valencia
Emilio Braña, marzo 2018

La reunión del Patronato de la Fundación Andreu Nin en Valencia abre interesantes perspectivas de trabajo y crecimiento. Tuvo lugar el sábado 24 de febrero, con la presencia de las delegaciones de Madrid, Barcelona, Valencia y Asturias.
El día anterior asistimos al acto de inauguración en la Casa del pueblo de Paterna de la exposición “Espacios de memoria: Las brigadas internacionales”. La comisaria de la muestra es la compañera Mariadó Hinojosa, que ha hecho importantes descubrimientos sobre la figura de Bob Smillie, compañero de Orwell en su aventura española. Casualidades de la vida: una apertura de militancia antifascista en la señalada fecha del 23 F, y exposición con pinta de izquierda comunista en la sede del PCE. Los tiempos están cambiando…
Previamente a la reunión del Patronato, hicimos un pequeño recorrido a pie por le centro de Valencia; las personas que nos guiaron nos enseñaron la antigua sede del POUM, (calle Pintor Sorolla,11), expropiada a la patronal después del golpe de estado del 36. En la actualidad el elegante edificio ha sido sustituido por un bloque de metal, hierro y cemento de una compañía de seguros. En la esquina de enfrente estaba construyéndose la central del Banco de Valencia (hoy base principal de la Caixa, huida de Catalunya). Los viejos militantes poumistas contaban cómo se subían a los andamios para observar las maniobras de los militares en la Alameda, a nivel inferior.
Empezamos la sesión a las 11 de la mañana, con la constitución de la mesa, que quedó formada por:  Enrique del Olmo (Madrid), Peio Erdociaín (Catalunya), que actúa como secretario de actas; Miquel Coll (Valencia) y Miguel Ángel Fernández (Asturias). Se aprobaron las cuentas 2017 y el presupuesto 2018. Se informó de las actividades desarrolladas en las distintas zonas durante al año pasado y se expusieron los proyectos para el presente; la relación de eventos es muy amplia, procuraremos ir informando puntualmente desde estas páginas.
Una buena parte de la sesión se dedicó a cuestiones de organización interna. Se recordó a compañeras y compañeros fallecidos; se admite la dimisión del secretario, Rodríguez Lorite, agradeciendo su esfuerzo en todos estos años y se nombra en su puesto a Pilar Arias, en la coherente posición de feminizar el Patronato. Se darán los pasos para recuperar la página web, herramienta muy útil de información y necesaria para quienes se dediquen a la investigación histórica, por la documentación que contiene.
Se refuerza numéricamente el Patronato. Se declara constituida la Fundación en el País Valençiá, se dará un impulso a la organización en Catalunya, se darán los pasos, a través del calendario de actividades previstas, para ponerla a funcionar en Navarra y Galicia.
Se dedica un punto específico a la Memoria histórica. El acta de la reunión dice:
 La FAN está totalmente comprometida con la Memoria Histórica y la reconoce como factor fundamental de la crisis de régimen. Es el reconocimiento de la dignidad de las víctimas. Está apoyando las querellas por crímenes contra la humanidad (“Querella Argentina”) en las distintas ciudades dónde se está impulsando. En España hay 2.400 fosas sin abrir y no menos de 156.000 desaparecidos. Crímenes contra la humanidad, torturas… No se trata solo de los desaparecidos. Es también el tráfico de bebés robados que se perpetúa hasta bien entrados los 80. Las generaciones que vivieron la transición no han conseguido evitar que el franquismo haya continuado por otros medios. La Memoria es nuestra y no tiene que encasillarse en la “Historia Oficial”: vigencia de la impunidad contra el ataque a los derechos humanos.
Terminada la reunión del Patronato, se abrió la sala al público para presentar dos publicaciones: De una parte, el libro de Pepe Gutiérrez y Pelai Pagés, La Revolución rusa pasó por aquí” (Editorial Laertes); de otra, Paco Carvajal, (El Perro malo ediciones), nos trajo el único libro de poesía de Víctor Serge, “Resistencia”. Maridó Hinojosa nos regaló el recitado de algunos poemas de la obra.
Cerramos la jornada en La Malvarrosa; animados por las buenas perspectivas de la Fundación, el sol, y compartir comida y conversación. Al día
siguiente, Valencia hacía la despertá, la mascletá y la Crida de Fallas; la señora del caloret se ha librado, pero sus compinches populares, que tanto presumían en estas fiestas, están cayendo uno tras otro en manos de la Justicia, por saquear el erario. Nosotros regresábamos a seguir trabajando, que buena falta hace.

Rosa Luxemburg en el movimiento revolucionario y en la II Internacional: sus críticas a Lenin y a la revolución rusa

enero, 2018

En octubre de 1916 miles de mujeres obreras fueron a recibir a Rosa Luxemburg a su salida de la cárcel (en la que entraría unos meses más tarde como presa preventiva). Pocos meses después de la caída del muro de Berlín, a principios de los noventa, más de 100.000 ciudadanos de la Alemania occidental desfilaron ante su tumba en el Berlín oriental. Aquellos homenajes inesperados, espontáneos y sentidos a una revolucionaria internacionalista demostraban que, pese a los silencios, a los “olvidos” y a la tergiversación selectiva de sus escritos, aquella “Rosa la roja” había dejado su impronta en el movimiento obrero de la primera preguerra y en al menos una parte de la izquierda europea contemporánea

Artículo de María José Aubet para 'mientras tanto'

 

Rosa Luxemburgo, la rosa roja del socialismo
15 de enero, 2017

Espada y llama de la revolución, su nombre quedará grabado en los siglos como el de una de las más grandiosas e insignes figuras del socialismo internacional.

Artículo de Josefina L. Martínez para ctxt.es

Jornadas de la Fundación Andreu Nin en Madrid sobre el movimiento obrero español y la influencia de la revolución rusa

2 y 3 de marzo, Madrid

Jornadas de la Fundación Andreu Nin en Madrid sobre el movimiento obrero español y la influencia de la revolución rusa. 2 y 3 de marzo de 2018. Club de Amigos de la Unesco.

 

 

 



 

 

 

50 aniversario Mayo 68

 

Mayo 68, voces y revueltas de la esperanza

Mayo de 2018, Manuel Garí - Jaime Pastor

Cincuenta años después del mítico mayo ¿es útil repensarlo? Sin duda, pues interpretar el pasado en el presente ayuda a construir el futuro. La memoria es un espacio de lucha política (Kristin Ross), por ello no es casual que De Gaulle planteara en junio de 1968 olvidar de inmediato la “pesadilla” de las recientes jornadas de huelga general y barricadas y ...

Artículo de Manuel Garí y Jaime Pastor en 'PÚBLICO'

Cincuentenario de 1968

Recordar que la única fuente de financiación de la revista 'VIENTO SUR' es la contribución de quienes la leen y apoyan, ya sea a través de la renovación y la ampliación de las suscripciones, o mediante donaciones. Por ello pedimos tu colaboración.

Artículos de 'VIENTO SUR' sobre Mayo del 68

Mayo del 68: retratos en dos tiempos y con dos caras

 

Artículo de Pepe Gutiérrez en 'KAOSENLARED'

Asturias. Un viaje de la memoria Revolucionaria

Mayo de 2018, Antonio Rubira

Un viaje en tren a la Cuenca Minera del Nalón en 2018 para hablar sobre la lucha de la clase obrera en los años treinta, se convierte en un viaje a la Asturias revolucionaria de 1934.

 

 

Artículo de Antonio Rubira en 'KAOSENLARED'' Asturias, un viaje de la Memoria Revolucionarias

Descubrimiento Histórico de manuscritos de la Oposición de Izquierda de principios de la década de los 30

Septiembre de 2018

En febrero de 2018 se encontraron unos 30 documentos manuscritos de miembros encarcelados de la Oposición de Izquierda trotskista de los años 1932-1933 en la prisión de Verkhneuralsk en los Urales al sur de Rusia.

Artículo en ELPORTEÑO.CL

 

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